Ponte en situación. Tienes algo más de 40 años, hijos – de esos que no paran quietos, que se apuntan a todo tipo de actividad y que aún necesitan que seas tú quien les lleve a cualquier lado… – y una pareja con la que has decidido “ir a vela, dejarte llevar, porque si usas el embrague, discutís.”

¿A que te suena familiar? Pues, ‘Perdidos’ retrata esas escenas de vida cotidiana desde el punto de vista de Juan (Agustín Jiménez) y Luís (https://bekultura.com/wp-content/uploads/2020/11/hipno-1.jpg Chamarro), dos empleados de una empresa de recambios y reparaciones de calderas, quienes se encuentran cada mediodía para comer en el mismo bar.

Un buen día deciden ponerle algo de diversión a sus respectivas vidas y relaciones de pareja… Y nada más volverá a ser como antes… La trama, que gira alrededor de la amistad, el amor, el sexo y la ambición, se desarrolla en tono de humor. Jiménez y Chamarro lo hacen magistralmente bien, desempolvando además, todas sus habilidades como mimos, ya que no utilizan objetos, pero sí actúan como si los tuvieran entre las manos. Asimismo, tampoco hay otros personajes en el escenario, pero sí actúan como si los hubiera, en más de una ocasión.

El resultado, como no podía ser de otra forma, un público – el día de nuestra visita colgaron el cartel de completo – totalmente entregado, que no para de reír a carcajadas.

En esta comedia escrita por Ramón Madaula, con final inesperado, dirigida por Ignasi Vidal (Antoine, ‘El Médico’ el musical, El Plan, etc.) “te ríes mucho y sufres con ellos a la vez”, parafraseando a Ignasi.

‘Perdidos’ (hasta el 22 de agosto en el Patio del Teatro Quique San Francisco de Madrid ex Galileo Galilei) es sin duda un imprescindible para pasarlo bien en este caluroso verano y también para reflexionar.