Ella es una de las seis estrellas que han brillado bajo la dirección de Luis Luque en el delicioso Celebración que ha estado en cartel en las reputadas tablas de las Naves del Español en Matadero.
Madrileña de purísima cepa y con unos 76 años increíbles, lleva en esto de la interpretación toda la vida. Su cara fue inmensamente popular gracias a sus continuados éxitos en el teatro, el cine y la televisión, ya que fue de las valientes que aceptó que el destape, era una condición insuperable en aquella época post Franco con la que había que tranzar para seguir manteniendo una carrera digna. E incluso en aquella época en la que fue mal considerada sex-simbol, su filmografía se fue completando con excelentes títulos. Ha trabajado a las órdenes del Eloy de la Iglesia, Antonio Jiménez Rico o Carlos Saura; ha interpretado personajes de Lorca, de Shakespeare… En la televisión su nombre está unido al de series inmortales como El Pícaro, Nada es Para Siempre, o Habitación 503.
Es jovial y encantadora. Cada día es el primer día y el último. Cada función, igual.
Pasen y lean…
Alberto Vázquez: ¿Qué ha sido Celebración?
María Luisa San José: Ha sido una celebración de nuestro oficio a través de la puesta en escena de las experiencias de seis veteranos que, circunstancialmente, han representado de alguna forma la historia reciente de España. Es una fiesta escénica y audiovisual, divertida, tierna y emocionante, que hace un recorrido social y cultural que apela tanto a los que vivieron lo que se cuenta, como a los jóvenes interesados en saber de dónde vienen.
Alberto Vázquez: ¿La edad hace más estrechos los caminos?
María Luisa San José: Depende de cómo la mires. La vida se vive a lo largo y a lo ancho, y cuando me doy cuenta de que ya a lo largo no va a ser, me queda vivir a todo lo ancho. Y lo hago.
Alberto Vázquez: ¿Cómo fue trabajar con esos compañeros de toda la vida y con el gran Luis Luque?
María Luisa San José: Todo un reto. Más allá de lo agradable del descubrimiento de Luis Luque y el reencuentro profesional con los compañeros de toda la vida, se da el hecho novedoso de que nos interpretamos a nosotros mismos, y el texto se basa en nuestras propias vidas. No hay ficción donde esconderse.
Alberto Vázquez: Has logrado trabajar durante décadas ¿Esta oportunidad es un regalo?
María Luisa San José: Sí lo es. Es una oportunidad para probarme en un terreno inexplorado. Esta vez la fortuna me ha sonreído; ya sabemos cómo es esta profesión, a veces estás arriba y a la vista de todos, y otras no estás para nada. Estoy hecha a ello.
Alberto Vázquez: ¿Cómo fue tu andadura personal durante la difícil época de la transición y el destape?
María Luisa San José: Fue dura, a pesar de la popularidad que me dio. Yo empecé en teatro y haciendo dramáticos en televisión. De repente, tras el fin de la dictadura, con la apertura social, política y cultural, se me convirtió, para bien y para mal, en un sex-simbol. Eso solo fue un paréntesis en mi carrera, terminado aquello yo seguí haciendo teatro, cine y televisión. Pero ese corto periodo fue tan potente que ha prevalecido en la memoria colectiva hasta ahora mismo.
Alberto Vázquez: ¿Con qué película te quedarías en el caso de elegir una de tu excelente filmografía?
María Luisa San José: No me quedo con una, me niego. Pero ahora me viene al recuerdo Los nuevos españoles, de Roberto Bodegas, dentro de lo que se llamó “la tercera vía”, y por la que fue premiado todo el reparto en los Premios del Sindicato Nacional del Espectáculo.
Alberto Vázquez: ¿Y de tu andadura televisiva?
María Luisa San José: Pues de una, nada. Son muchísimas. Me viene ahora Usted tiene ojos de mujer fatal de Jardiel Poncela, con Pepe Martín e Ismael Merlo. O Veraneantes, de Gorki. Y más, y más…
Alberto Vázquez: Y siempre has sido una dama del teatro…
María Luisa San José: En el teatro es donde he tenido mejores oportunidades, donde me he dado rienda suelta, lo que más he disfrutado y sufrido. Como digo en Celebración, yo soy actriz, y punto.
Alberto Vázquez: Muchos espectadores os han descubierto al ver esta obra ¿Qué les dirías?
María Luisa San José: Que es un canto a la vida. Sin máscaras. Un testimonio histórico, un camino vivencial y emocional que les ayudará a conocer la importancia de un oficio a través de una generación de actores que es imprescindible en la historia de la cultura en España.
Alberto Vázquez: ¿Te quedan sueños por cumplir?
María Luisa San José: Siempre quedan cosas por hacer, por supuesto. Pero yo he vivido el sueño que soñé desde niña. Se cumplió.
Alberto Vázquez: ¿La palabra más bonita?
María Luisa San José: AMAR, que es un verbo.