Julián Fontalvo llegó a España en el año 2004 de su Colombia natal.
Al cantante y actor le hemos podido disfrutar en espectáculos musicales de gran éxito como el ‘We Will Rock You’ del Teatro Calderón, ‘Avenue Q’, ‘Spamalot’ (de Tricicle), ‘The Hole’…
Se lanzó en solitario con su primera creación propia ‘Gyn & Tony’, apadrinada por el grupo Tricicle, y actualmente está triunfando en el Teatro Marquina con ‘El imitador’, el segundo monologo musical creado por él (parte ficción y parte autobiográfico), donde te enamora con una sorprendente recopilación de 70 voces de los mejores artistas y grandes e icónicos éxitos de la música que marcaron los 80’.
Fontalvo después de tantos años en España, y crear una familia…, ¡ya es nuestro!, ya no se lo devolvemos a nuestros hermanos colombianos ¡Ah! “Santa Rita, Rita, Rita…”
Roxana Esteve: Julián, ¿qué querías ser de adulto cuando eras niño?
Julián Fontalvo: Cuando era niño me atraía mucho el mundo del entretenimiento, el cine, sobre todo. De niño veía en Colombia un programa que se llamaba ‘Detrás de cámaras’ y, ahí básicamente lo que hacían era mostrar cómo se hacían las películas. Cada semana era de una película diferente y a mí me apasionaba ese mundo, y también el mundo de estar detrás de un micrófono, de cantar, de hacer voces de los personajes de las películas.
Roxana: Pero entonces…, por ese programa ¿querías estar detrás de las cámaras?
Julián: No, me apasionaba ese mundo, me era muy atractivo y desde muy pequeño apuntaba a que me gustaba actuar, cantar…, y lo mostré desde muy temprano.
Roxana: En realidad era delante de cámara…
Sí, pero es cierto que terminé estudiando radio y dirección, y producción de tv, porque cuando eres pequeño y allí en Colombia dices que quieres actuar te suelen decir “Cantar y actuar está muy bien, pero es una de esas profesiones complicadas”, “A ver si te va a dar de comer”, “Hay que tener una vida estable…”.
Roxana: Me suena al mensaje que tu madre te da en El Imitador ¿Cuánto tiene el espectáculo de autobiografía, y cuánto de ficción?
Julián: Yo empecé a escribir la historia y el ejercicio era hablar un poco de mi recorrido de artista, pero se fue transformando poco a poco porque salieron personajes y algunas situaciones las cambiaba, exageraba o las convertía en otras cosas para que fueran más atractivas; quería que fuera una historia de ficción, pero tiene mucha verdad de mí porque el camino está dibujado en ese sueño de niños que quiere ser artista, con todos los obstáculos y dificultades que tienes en el camino.
El camino que tiene ‘El Imitador’ es distinto al mío, pero de alguna manera se parece, pero sí hay cosas verídicas, reales…, y la más verídica y cierta es la situación que planteo al principio cuando cuento que mi madre y mi hermana estaban embarazadas a la vez ¡eso fue verdad!, me pareció una cosa muy curiosa, y lo dejé.
Roxana: ¿Cuál es el secreto para que tu garganta resista sin romperse al imitar 70 personajes tan difíciles y dispares?
Julián: Cada función es un reto porque es dura la tralla que le estas dando a la voz una hora y media sin parar. hablando y cantando, y cantando temas complicados. En muchas ocasiones digamos, que siempre he estado haciendo lo que he hecho en todos estos años que he trabajado en musicales; dormir bien, cuidarme, hidratarme bien, y antes de la función o el día de la función no hablo; intento utilizar la voz lo más mínimo, sin hablar para evitar cansarme y después de la función, intento no hablar mucho también, y evitar sitios ruidosos para poder aguantar la función, que es dura.
Roxana: ¡Que sacrificado! Pero, Julián si se desgarrara la voz (¡Ojalá, nunca ocurra!) ¿cuál es tu “secretito”?
Julián: Yo me he dado cuenta que el mejor descanso para la garganta es hacer voto de silencio. También puedes tomar miel con algo calentito, eso funciona, pero lo mejor para que descanse la voz es no emitir ningún sonido con las cuerdas relajadas, dormir 8 horas e hidratarse.
Roxana: ¿Con qué personaje disfrutas más, o es tu preferido?
Julián: La verdad es que con todos disfruto porque cada uno tiene una respuesta distinta del público, pero cuando hago personajes femeninos a Amaya Montero, Edith Piaf o Tina Turner que son personajes femeninos que tiene voces muy particulares y que la gente no se espera…, cuando aparecen en el espectáculo es curioso, porque hay una reacción del público que es interesante y bonita.
Con Tina Turner en concreto, ¡la gente no se lo espera!, esa forma de cantar, de moverse en el escenario…, y hay una reacción muy grande del público.
Roxana: Posees una voz preciosa, capacidad y don para imitar, el texto está ajustado al detalle, y para colmo tienes el ritmo latino en tu cuerpo…
Julián: Algo de eso tenía que mostrar en el show, además, cuando estaba escribiendo la historia quería que eso también se mostrara; ese color latino, no solamente en el baile cuando bailo merengue o salsa, sino también en la forma de hablar con los personajes; por ejemplo, con mi madre cuando era adolescente, o la vecina dominicana, que quería que estuvieran presente, pues son matices que enriquecen el espectáculo, el discurso, y los personajes.
Roxana: Has construidouna fantástica ‘tarta de boda’ incluida la guinda.
Julián: ¡Gracias! Además, a mí me gusta mucho jugar con los acentos. Se me da fácil hacer acentos sobre todos los latinos; está el argentino, el mejicano, la dominicana, el afroamericano de NY… Hay muchos colores y eso lo quería también buscar en el show
Roxana: Te colocas unos simples cascos, una peluca en dos contadas ocasiones y dejamos de verte como por arte de magia ¡no vemos tu cabeza rapada porque tu consigues que imaginemos los rizos, o las melenas de los artistas ¡Increíble!
Julián: (se ríe con timidez) Sí, a mí es una cosa que me parece mágica de este espectáculo a nivel minimalista. Tuve clarísimo que quería que fuera así; yo de negro, muy neutro, y a partir de ahí crear esos personajes sin nada, sin vestuario ni atrezo, solo algún detalle como un sombrero, una peluca, pero son muy pequeños esos detalles y me encanta esos momentos donde hago eso, pero todo se basa en la historia, en la luz y en el manejo del sonido. Todo ello era muy importante porque a nivel grafico tampoco hay nada, y el concepto del show era eso; que tu pudieras ver perfectamente a todos los personajes y que pudieras verlo en un contexto sin que ese escenario, ni espacio estuviera ahí, solo con la actuación y el manejo de la luz.
Roxana: ¿Cuál de todos los cantantes te ha costado más?
Julián: Las voces que son tipo rotas, que tiene mucho whisky como Sabina, son voces que a mí me cuestan particularmente y por ejemplo con Tina tengo la facilidad de llegar a ella, pero luego mantener y apretar ahí…, porque ella tiene una tesitura y unas notas agudas con un registro distinto de mujer y yo me tengo que adaptar y encajar en el registro que más me convenga para parecer que estoy cantando como ella, ¡ese puede ser el reto más importante!
Roxana: ¿Hay algún artista que te gustaría incorporar en tu repertorio, pero se te resiste?
Julián: Cuando empecé a hacer el guion, un reto era encajar las canciones dentro de la historia porque todas tiene que ver con la historia y, de hecho, si te fijas todas las canciones están cronológicas con la historia comienzan en los 80 y termina en el dos mil y pico. Todas las canciones tenían que encajar perfectamente y estar relacionas, y yo ser capaz de imitar esas voces. Fue mágico el momento de escribir el guion, pues tal y como lo iba haciendo fueron saliendo las canciones muy fáciles; yo pensaba y la canción salía automáticamente, alguna fue más complicada, pero no se quedó ninguna de las que yo quería poner, y no se me resistió ninguno de los personajes que quería meter. Sí me gustaría imitar más, o trabajar más a Mick Jagger, y por eso no lo he hecho, pero me gustaría más adelante.
Roxana: ¿A quién admiras?
Julián: Hay muchas personas…, me sale una con la que tuve el placer de actuar en su boda y es Rafa Nadal que me parece un ejemplo a nivel social, de persona con todo lo que hace con su comunidad a nivel social, sencillo este tipo de personas me parece admirable. Es un modelo a seguir, estoy muy contento y muy orgulloso por él por haber conseguido un título más ¡Es un orgullo nacional! Estaba viendo las noticias todos estos días y la gente no para de hablar de lo mismo; y de alguna manera la gente se siente conectada como en el mismo plano de alguna manera, ¿sabes? Es como una persona a la que admiras mucho, y además es tan humilde, tan sencillo…, muy contento por ese logro y súper orgulloso que contemos con una persona así en este país.
Roxana: ¿Qué te hace reír?
Julián: No sé, tengo un humor muy particular. Hay cierto tipo de humor, pero tiene que ser…, el inteligente, y surrealista o absurdo.
Roxana: ¿Por qué debemos ir a ver ‘El Imitador’?
Julián: Creo que ‘El Imitador’ es un show para hacer un viaje de emociones a través de la música, utilizando la música como vehículo para transportarse en el tiempo. Es el concepto en que está basado la historia el show; que la música es capaz de transportarnos junto con el olfato pues son los dos estímulos que te pueden hace viajar en el tiempo de manera más rápida, y hacer recordar cosas de manera inmediata, por eso cuando vas a ver ‘El Imitador’ estás viendo una historia de vida que tiene que ver con la historia de un artista, pero que se puede relacionar con la búsqueda de los sueños de cualquier otra persona; las relaciones interpersonales, el amor, muchas cosas…, y sobre todo lo que vas a hacer es viajar con este personaje y viajar con esas canciones que forman parte de estos personajes. Hacer también un viaje personal porque cada espectador al mismo tiempo que ven el viaje de ‘El Imitador ‘de Julián (de mi vida) están también haciendo un viaje personal a través de esas canciones que significan para ti una cosa y para mi otra cosa, y al final significa algo para todos y eso es lo bonito; que es un viaje un viaje personal.
Roxana: Hemos podido comprobar que además de un estupendo profesional eres una persona muy sencilla ¡Gracias Julián, por conversar con nosotros!
Julián: ¡Muchas gracias a ti, Roxana! Me alegra que te haya gustado el show, y espero que toda la gente de Madrid o que pasen por la capital vayan a ver ‘El Imitador’, pues los va a entretener, van a disfrutar con la música y van a viajar por el tiempo.
Datos de interés:
‘El Imitador’
Lugar:
Teatro Marquina
Dirección:
C. de Prim, 11, 28004 Madrid
Duración:
Una hora y media (sin descanso)
¡Espectáculo recomendadísimo, y para todos los públicos!