Lolita Flores: “Creo que lo mejor que he hecho en mi vida ha sido ser madre”

Se llama Dolores González Flores y, si le preguntas cómo se definiría lo primero que hace es hablar de su familia. Eso es ella: Familia. Pero también amor y talento y una humildad y una humanidad que te sonrojan. Escucharla es un tintineo de cascabeles y mirarla el mejor paisaje. Abrazarla, la mejor cura para el alma.  

Para todos es, Lolita. 

Lolita es una artista que empezó cantando, que ha hecho cine, televisión; que está activa plenamente también en el teatro. Es hija de dos de los artistas más grandes de este país: Lola Flores y Antonio González el ‘Pescaílla’ .  

Toda su familia es de grandes artistas: su hermana es una ‘monstrua’ llamada Rosario Flores. Tuvo un hermano, que era Antonio Flores, que sigue siendo un poeta maravilloso cuyas canciones todavía brillan más, aunque él ya no esté. Tiene dos hijos: uno músico, Guillermo Furiase y una actriz, Elena Furiase. Además, tiene una tía, Carmen Flores, que en América (sobre todo en Argentina) es adorada y que no se puede quejar de casi nada. Y además tiene una sobrina que ha puesto las series de televisión en lo más alto en el mundo con ‘La casa de papel’ y ‘Vis a vis’: Alba flores, que, como todo el mundo sabe, es la hija de Antonio. 

En resumen, una familia de artistas, una familia muy bien avenida y criados con mucho amor.  

Alberto Vazquez: Has pisado los escenarios yo creo que desde niña, ¿recuerdas la primera vez que fuiste consciente de ello? 

Lolita: Uy por Dios.. ¡claro que sí! Fue en un espectáculo de mi madre. Antiguamente en los espectáculos, el último día se invitaban a gente a cantar en el fin de fiesta, y a mí me sacaron al escenario también. Por cierto, me resbalé por la escalera por la que tenía que salir, pero me repuse y llegué al escenario con mi abanico y un trajecito cortito de lunares. Tendría 6 o 7 años aproximadamente. No recuerdo en qué teatro fue, porque han pasado la friolera de 50 y pico de años (sonríe). 

A.V.: O sea que empezaste con un resbalón y fíjate a dónde has llegado… ( nos reímos ). 

Lolita: Bueno, la vida del artista siempre tiene resbalones. Me preparé pronto (ríe) pero lo bueno es que enseguida se toca fondo y una se pone de nuevo en pie, como un ave Fénix. Yo creo que ahí mi madre se dio cuenta de que realmente tenia madera de artista, cuando me resbalé y me puse de pie como pude; aunque corriendo, mi padre, lógicamente, vino a ayudarme. 

A.V.: ¡Qué bonita metáfora y qué bonita anécdota!  Has crecido rodeada de música y escenarios, de luces, pero no de actrices, si no me equivoco, ¿cuando descubriste la actriz que vivía en ti? 

Lolita: Yo en realidad soy muy mala para descubrirme a mí misma. Creo que la vida y el destino te van poniendo senderos y tú los vas cogiendo. Hice una película con 5 años que se llamaba ‘La gitana y el Charro’ en Guatemala, con mi madre. Más tarde hice otra película con 18 años que se llamaba ‘Haz la loca y no la guerra’. Siempre me gustó el cine y meterme en la piel de otros personajes así que fui haciendo pinitos.  

Con 20 añitos hice un corto con Antonio Ferrandis, María Luisa Ponte y con Rosario García Ortega que se llamaba ‘La buena vida’. Recibió muchos premios y de ahí vinieron varias cosas rodadas: yo seguí cantando, pero me proponían hacer una serie o una película y fui tirando para adelante.  

Yo no pienso las cosas, pienso lo que voy a hacer inmediatamente pero nunca pienso si soy actriz o cantante. Yo soy artista. Es la profesión que tengo. Tampoco me pongo a pensar dentro de un año voy a hacer no sé qué. No, dejo que el destino me marque el camino y yo sigo andando, eso sí, para adelante siempre, mirando al frente. 

A.V.: Sabemos cómo se prepara una canción, la gente más o menos se lo imagina también. Pero  ¿qué haces tú cuándo te llega un libreto o te llega un guión? ¿cuál es tu método para construir un personaje, darle vida, ponerlo en pie? 

Lolita: Pues te parecerá mentira, pero no tengo ningún método. Yo leo el guión o el libreto e inmediatamente me va llevando al personaje; Creo que todos tenemos esos sentimientos de odio, de amor, de desamor, de asesinos y un poco todos maltratadores (ja ja ), de buenas personas, monjas y putas . Todos somos un poco de todo, pero las circunstancias te hacen sacar uno u otro sentimiento . 

No, yo no preparo nada; me leo el texto y me va llevando al personaje. Si ese personaje me gusta, y creo que soy capaz de hacerlo, lo hago, como en ‘La plaza del diamante’ o ‘Fedra’. Me tiene que emocionar, me lo tengo que creer y que entre en mí. Sólo creo en las cosas cuando entran. Yo siempre he sido, por lo menos con mis hijos, así siempre : “la letra con sangre no entra, la letra tiene que entrar sola y llegar hasta el corazón,  hasta el alma”  y ahí puedes hacer un buen personaje. A mí afortunadamente o por desgracia me sale así. 

A.V.: ¡Qué bonita eres! Yo, desde que te conozco, he visto todo lo que has hecho, me arrepiento mucho de no haber podido ver ‘La plaza del diamante’, por que estarías maravillosa, seguro. Pero ‘Fedra’ fue algo especial, y me pareció un personaje soñado, una interpretación mágica, un entorno precioso… No sé si piensas igual. 

Lolita: Bueno, ‘Fedra’ es de los papeles más importantes que he hecho, sin duda. Pero para mí hubo un antes y un después con ‘La plaza del diamante’. Y había hecho comedia, como ‘Sofocos’, un melodrama que se llamaba ‘Ana en el trópico’ de Nilo Cruz, con Toni Acosta y más gente, María Teresa Rojas, una gran actriz de Miami, una mujer interesantísima, pero después de ‘La plaza del diamante’ todo fue distinto. 

A.V.: Y ‘La fuerza del cariño’ de haberla hecho con Elena, tu hija, ¿hubiera sido bonito o hubiera sido terrible? 

Lolita: Hubiera sido mucho más complicado, porque yo no sé llorar de mentira. Tanto es así que “matar” a mi hija todos los días me pasó una factura emocional muy grande. Y eso que no era Elena. De haber sido ella, o mi sobrina, no quiero ni imaginarme la situación: hubiera tenido que cortar la función mucho antes. 

Pero bueno, también se aprende. Y yo he aprendido que tengo que ser más cuidadosa con las cosas que elijo, porque soy demasiado sensible. 

Estoy contenta con todo lo que he hecho, desde ‘Prefiero que seamos amigos’ con Luis Mottola, hasta ‘Asamblea de mujeres’ dirigida por Juan Echanove. He tenido la suerte de que me hayan dirigido desde Tamzin Townsend a Nilo Cruz, pasando por Iborra, Luis Luque, Magüi Mira, Joan Ollé y Juan Rubio ahora. 

La verdad estoy muy contenta de los personajes que hago porque me enamoro de ellos, de ellas: lo mismo de Natalia, que de Fedra, que de Claudia, que ahora de Ángela con ‘Llévame hasta el cielo’. Aunque es una comedia muy ligera y es una obra para que la gente se divierta, una fantasía, me meto igual en su piel, en su corazón y en su alma. 

A.V.: Y ahora te lanzas al ruedo y montas productora ‘Lerele producciones’ ¿Te lo encontraste, lo decidiste..?  ¿Cómo lo llevas? 

Lolita: Es duro, pero bueno, en la vida hay que arriesgar y en el momento del confinamiento me iba a volver loca de estar encerrada e inactiva. Así que decidí trabajar con este libreto de Nacho Llorente que me gustaba y que tenía hacía tiempo. Cogí a mi equipo más cercano y dijimos: ¡vamos para adelante y que sea lo que Dios quiera! Gracias a Dios tenemos muchos bolos. La gente se ríe, se lo pasa bien… No pretendemos nada más que eso, que la gente se lo pase bien durante algo más de una hora ¡que dure como las pilas duracell!  

Mientras la gente quiera verme en un escenario, y a Luis Mottola también, pues para delante. De momento estamos llenando los sitios, creo que todo lo que sucede conviene, y creo que después de una tragedia tan tremenda como ‘La fuerza del cariño’ me viene bien hacer algo tan ligero. Es una obra llena de magia y la gente la disfruta.  

De vez en cuando hay que dejar apartado los clásicos, los dramones, para hacer este tipo de cosas más ligeras; y luego nunca se sabe, el destino me marcará lo siguiente 

A.V.: Háblame de la vuelta al Galileo. Haréis del 25 de agosto  al 12 de Septiembre ¿qué es para ti trabajar con Luis? ¿Es casi estar como en casa  y disfrutar de ese rato de volar juntos? 

Lolita: Yo sigo pensando en el destino. Qué casualidad que ahora el Galileo se llame Enrique San Francisco, alguien a quien he querido muchísimo y que se nos ha ido. Ha sido uno más en mi casa, no solo para Rosario, sino para todos nosotros. Enrique ha sido algo muy especial. Volver al Galileo es señal de que la gente lo disfrutó y eso es una satisfacción como productora y como actriz. 

Luis Mottola ha sido alguien que ha aparecido en mi vida hace 5 años, tiempo en que hemos hecho tres obras de teatro juntos, que nos han ido de maravilla. Con ‘Prefiero que seamos amigos’ casi hicimos 200 funciones.   

Por su parte, ‘La fuerza del cariño’ tuve que cortarla, porque realmente me superó esa tragedia a diario. Y ‘Llévame hasta el cielo’ esa la tercera que hago con él. 

Es un actor que me va muy bien arriba del escenario, hay mucha química, hay mucha complicidad, como me pasa con otros actores, como Loles León o Juan Fernández. En este caso, al cortar yo ‘La fuerza del cariño’ cogí el equipo que más cercano tenía y a quienes “corté las alas” por mi decisión y ahí seguimos, trabajando.  

De verdad, estoy feliz de trabajar con Luis Mottola porque es un grandísimo compañero y un gran actor y cuando hay dos personas solas en el escenario hay que confiar mucho en el otro. Tú lo sabes, porque eres actor como yo, y tener un compañero que te echa una mano vale oro. 

El universo conspira para juntarte con gente hermosa, como lo ha hecho para juntarme contigo, Alberto, desde esa ‘Jaula de grillos’ en la que te vi y ahí empezamos una bonita amistad y hablamos mucho y nos contamos nuestras cosas. La gente que encuentras en el camino que no buscas y simplemente aparece, es por algo.  

No existen las casualidades, pero sí la causalidad.  

A.V.: Dos últimas preguntas: ¿Tienes un personaje soñado por hacer? Y ¿Qué le dirías a los que quieren empezar en nuestro mundo? 

Lolita: ¡Que lo piensen antes jajaja! Es una profesión muy bonita, pero muy dura; muy satisfactoria y muy cruel. Les diría que se lo piensen mucho; pero que si realmente les gusta y deciden que quieren ser artistas, en todo lo que tenga que ver con el arte, que luchen, que perseveren, que tengan sus sueños y que le echen mucha paciencia. 

Luis Mottola dice que “hay veces que no te llaman ni siquiera para insultarte”. Es jorobado, pero en todas las profesiones hay sus luces y sus sombras.  

Por mi parte, mientras el público me lo permita, voy a seguir actuando. Y respondiendo a la otra pregunta, sobre mis personajes soñados, creo que hay muchas mujeres en el mundo con diferentes sentimientos y  maneras de ser. El ser humano es inagotable y, por lo tanto, ya vendrán personajes a mis manos y ya veré lo que hago! 

Pero mi verdadero sueño es ver crecer a mi nieto y a los que puedan venir, poder tener una vejez tranquila, seguir estando como estoy, bien, y seguir trabajando y dándole a la gente mi arte, qué es lo único que sé hacer realmente.  

Creo que lo mejor que he hecho en mi vida ha sido ser madre, aunque de mi profesión tampoco me puedo quejar. Doy gracias a Dios, gracias al universo, por todo lo que me da todos los días, por todo lo que tengo y por todo lo que seguro me tiene que dar, porque soy buena gente y los buenos nos lo merecemos. 

Foto de Bueno  @carlosbuenosite 

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Actor, cantante y ocasionalmente escritor. He desarrollado una amplísima carrera en la televisión, el cine, y sobre todo en el teatro musical participando en producciones como ‘Mamma Mía’,  ‘Antoine’, ‘Amar en tiempos revueltos’ o ‘Cuéntame cómo pasó’. Actualmente actuando en el musical ‘El Médico’.

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